Motor de arranque

¿Qué ventajas le ofrece un motor de arranque como pieza reacondicionada?

Con un motor de arranque para camiones de Mercedes‑Benz obtendrá una pieza reacondicionada fiable que se ha sometido a estrictos controles de calidad tras el acondicionamiento. El motor de arranque es un componente muy importante para que el vehículo esté siempre a punto para el día a día, ya que este se encarga de iniciar el proceso de combustión que pone en marcha el motor.

En el proceso de acondicionamiento profesional de Mercedes‑Benz se sustituyen todas las piezas de desgaste, como los puentes eléctricos o las juntas, por piezas nuevas. Además, en el proceso de reacondicionamiento también se equilibra el rotor. Esto aumenta la suavidad de marcha.

Para garantizar que la pieza reacondicionada original pueda utilizarse en el futuro sin problemas, en el proceso de reacondicionamiento se emplean grasas y pinturas especiales. Estos productos evitan la formación de óxido en el estátor y el rotor y garantizan una lubricación óptima.

¿Cómo funciona un motor de arranque?

Gracias al acondicionamiento según los estándares de calidad actuales de Mercedes‑Benz, el motor de arranque acondicionado de Mercedes‑Benz arranca el motor con prácticamente la misma fiabilidad que una pieza nueva. Puesto que el motor de combustión interna no puede arrancar por sí mismo, el motor de arranque es el encargado de iniciar el proceso de combustión. Este acelera brevemente el motor a 300 rpm y, a continuación, lo pone en marcha. El motor de arranque precisa corriente, que toma en gran parte de la energía de la batería. No obstante, solo se utiliza en los momentos en los que se produce el arranque del motor. A partir de este momento, la batería vuelve a cargarse con el alternador.

Motor de arranque para camiones como pieza reacondicionada con la calidad de Mercedes‑Benz.

Al optar por una pieza reacondicionada original ahorrará dinero y recursos. De este modo, contribuirá enormemente a un proceso de reacondicionamiento respetuoso con el medio ambiente, ya que para fabricar una pieza nueva se requieren más gastos y recursos que para una pieza reacondicionada.